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Cazador de tormentas

Contratista trabajador emplea trituradoras de Tigercat en operaciones intensivas de reducción de material y ayuda a los residentes a recuperar cierta normalidad después de desastres naturales devastadores.

— Paul Iarocci

Dustin Cooper, en sociedad con su padre, David Cooper, es el propietario de South East Mowing. El oriundo de Bristol, Tennessee, comenzó en el negocio directamente al salir de la secundaria en 2008, principalmente tomando contratos de corte de césped del gobierno federal, estatal y municipal en carreteras y taludes de autopistas. “Comenzamos con cuatro tractores John Deere, lo llevamos a 25 o 30 tractores y luego empezamos a llenar los espacios con trabajos de despeje de derechos de paso”.

Con hambre de crecimiento, Dustin buscaba constantemente nuevas oportunidades y diversificación. A medida que aumentó el trabajo de contratos de derechos de paso, descubrió que la cuadrilla estaba generando muchos residuos. “Buscábamos una forma de reducir esa vegetación y sabíamos que al menos podíamos poner una trituradora a trabajar”. La empresa compró una 6900 de Tigercat de segunda mano en la sucursal de Tidewater Equipment en Newberry, Carolina del Sur, en junio de 2024. “Después de conseguir una, buscábamos formas de expandirnos”. La reducción de residuos por tormentas parecía una opción lógica.


Tenemos un grupo principal de muchachos de Georgia, Kentucky, Virginia y Texas. Viajamos a todas partes como una gran familia.


— Dustin Cooper


Dustin estaba muy acostumbrado a viajar, habiendo completado contratos de corte de césped y derechos de paso en todo el sur de Estados Unidos. De manera crucial, también tenía conocimiento previo del sector y de los principales actores. “Cuando crecía, mi papá estaba en el negocio de recuperación tras desastres, así que sabía que esto era algo hacia lo que podía dirigirme”.

Dustin explica que su padre, David Cooper, abandonó la secundaria y se fue a trabajar en una mina de carbón. Quería más que un salario, así que comenzó a suministrar madera a la mina. “Trabajaba un turno de ocho horas, luego iba a cortar puntales de mina, los cargaba en su espalda, los subía a un camión de una tonelada, los llevaba a la misma mina y los vendía a la mañana siguiente antes de ir a trabajar”. Fue una manera indirecta de entrar en la industria de cosecha de madera dura de alto valor en el este de Tennessee y el suroeste de Virginia. “Estaba manejando una operación de chapa de madera bastante grande y ese mercado se desplomó en 1997”. La recesión coincidió aproximadamente con el huracán Fran en septiembre de 1996, lo que llevó a David a trabajar en su primera limpieza posterior a tormentas en Carolina del Norte. El negocio de recuperación tras desastres de David progresó a partir de allí.

Casi tres décadas después, Dustin aceleró su propio negocio de limpieza posterior a tormentas de manera rápida y agresiva. Tras recibir la primera 6900 en junio, compró una segunda 6900 usada de Tigercat en julio. En noviembre, adquirió su tercera 6900 completamente nueva. A principios de junio de 2025, la cuadrilla había acumulado colectivamente más de 6000 horas en las tres máquinas.

Declaración de desastre

La Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) coordina la respuesta federal a los desastres que reciben una declaración presidencial de desastre. Una vez que se declara un evento climático, FEMA contrata a un contratista principal, responsable de todos los aspectos de las operaciones de recuperación y limpieza. La empresa de Dustin se clasifica como subcontratista y trabaja bajo el contratista principal. “Mi padre ha estado alrededor de todos esos contratistas principales durante tanto tiempo. Ellos lo conocían, y por supuesto estuvieron dispuestos a darme una oportunidad gracias a él”.

A principios de junio, visitamos una operación de limpieza en el condado de Coffee, Georgia, tras el huracán Helene, que tocó tierra nueve meses antes, el 26 de septiembre de 2024, cerca de Perry, Florida. La tormenta de categoría 4 trazó un camino de destrucción de 800 km (500 millas), trayendo fuertes vientos, lluvias intensas, marejadas de hasta 6 m (20 pies) e inundaciones masivas en todo el sureste de Estados Unidos. La pérdida económica total estimada está en el rango de 225 a 250 mil millones de dólares.
Dustin nos explica el proceso. “Una vez que se emite una declaración de emergencia, el contratista principal se moviliza. En este caso, es Southern Disaster Recovery o SDR. Los propietarios de viviendas y negocios son responsables de llevar los residuos a la carretera. El subcontratista de carga y transporte, Pride Contracting, con sede en Middlesex, Carolina del Norte, recoge los residuos de la calle y los lleva a los sitios de descarga temporales designados y autorizados. Luego entramos nosotros para hacer la reducción del material, convirtiendo los residuos en un producto reciclable”. FEMA es responsable de encontrar salidas para el material triturado. En este caso, el producto se transporta a granjas de arándanos en el condado para usarse como cama de cultivo.

El volumen de residuos vegetales generado por un huracán es difícil de comprender. Solo en el condado de Coffee, en los primeros cinco meses de este año, South East Mowing (el único contratista de trituración para el condado) procesó casi cinco millones de yardas de material, reduciéndolo a aproximadamente millón y medio de yardas (una yarda cúbica equivale a 0,76 m³). Las tres máquinas trabajan a la par, doce horas al día, los siete días de la semana, procesando 36 500 metros (40 000 yardas) de material cada día. Toda la operación consume más de 5700 l (1500 galones estadounidenses) de combustible por día, por lo que la planificación del suministro de combustible es una consideración logística importante. Para mantener la disponibilidad mecánica, Dustin cuenta con una cuadrilla de mantenimiento nocturno que también trabaja siete días a la semana.

Dustin valora enormemente a su cuadrilla. Ellos lo siguen dondequiera que el siguiente contrato lo lleve. “El año pasado estuvimos en Houston, Texas, trabajando en el huracán Beryl”. Incluyendo operadores de trituradoras, operadores de excavadoras, conductores de camiones y la cuadrilla de mantenimiento nocturno de cuatro hombres, se trata de una operación de 40 personas. ”Tenemos un grupo principal de muchachos de Georgia, Kentucky, Virginia y Texas. Viajamos a todas partes como una gran familia. Alquilamos casas para toda la cuadrilla e intentamos mantenerlos a todos cerca. Prácticamente todos viven como una gran familia en un campamento”.

Es un ritmo agotador, pero es la naturaleza del trabajo. La velocidad es esencial. “Desde junio del año pasado, he estado en casa cuatro días. No fuimos a casa para el Día de Acción de Gracias, pero todos tomamos el día libre. Cociné una gran comida aquí en Georgia y alimentamos a todos. Conduje a casa la mañana de Nochebuena y regresé aquí el día de Navidad. Y fui a casa para el Domingo de Pascua”.

Dustin señala que trata de mantener una relación estrecha con los contratistas de carga y transporte, ya que son su primera defensa contra los metales y otros materiales extraños que se mezclan con la materia prima. Cualquier metal o material de construcción y demolición que llegue al patio se separa y se lleva al vertedero. “No queremos pasarlo por la trituradora y no queremos enviarlo al usuario final. Por supuesto, dependemos de que los propietarios de tierras no lo mezclen con los residuos vegetales y también de los camiones que los recogen. Los transportistas están motivados para mantenerlo lo más limpio posible y que todos sigamos avanzando. Si no podemos triturar, ellos no pueden transportar”. Pero, como explica Dustin, la persona más importante en toda la ecuación es el operador de la trituradora. “El operador es la vida de esa máquina”.
El operador debe alimentar la máquina de forma óptima, manteniendo un flujo constante de material. Debe asegurarse de que el material esté limpio. Para ello, debe tomarse el tiempo de sacudir el exceso de arena de las masas de raíces y, lo más importante, observar la pila en busca de residuos extraños: metal, roca, asfalto y concreto. “Todo depende de los ojos del operador en cuanto a lo que entra en la máquina. Es una de las principales razones por las que compramos el nuevo T234B: para elevar más al operador en comparación con una excavadora”.

Dustin está impresionado con el cargador T234B, ya que lo califica como la combinación perfecta para la trituradora. La hidráulica eficiente y el motor FPT de cuatro cilindros de Tigercat ofrecen un rendimiento de combustible excepcional, inferior a 7,5 l (dos galones) por hora. Está equipado con una garra Rotobec RPA, de tamaño perfecto para la aplicación: lo suficientemente grande para mantener un buen flujo de material en la alimentación y lo suficientemente pequeña para caber en el canal de entrada. “Creemos que vamos a ahorrar mucho en piezas de desgaste en la parte trasera. No vamos a estar golpeando nuestras cadenas y pisos porque introduce los troncos suavemente en el canal. Si vas allá y observas la máquina con pulgar de pala, no puede llegar hasta el fondo porque entonces no puede abrir su garra sin golpear las paredes laterales”. La cabina de elevación alta mejora significativamente la visibilidad, lo que permite al operador ver dentro del canal. Esto disminuye los tiempos de ciclo de alimentación y da como resultado una entrada más limpia, con menos material extraño. Otra ventaja de una garra giratoria sobre una pala es que hay menos preocupación por colocar la trituradora en el ángulo particular requerido para alimentarla. El operador puede trabajar más rápido, con la flexibilidad de girar la carga para que encaje mejor en la entrada.

Presión del tiempo

El tiempo siempre es esencial en las operaciones de limpieza después de un desastre. “El objetivo de FEMA es devolver a la comunidad a un estado normal lo más rápido posible, por lo que presionan mucho para lograrlo y para que entremos y salgamos, devolviendo a la comunidad algún tipo de vida normal”, dice Dustin. “Van a priorizar las áreas de mucho tráfico para atenderlas lo más rápido posible”. Hay muchas consideraciones adicionales en torno a la priorización. Por ejemplo, en los días posteriores a una tormenta, el material dejado en zanjas de drenaje o alrededor de alcantarillas puede causar otra ronda de inundaciones si cae más lluvia. Con el paso del tiempo, la vegetación caída se seca, se convierte en una posible carga de combustible e incrementa el riesgo de incendios. Dado que los sitios de descarga tienen un tamaño limitado, la cuadrilla de Dustin debe trabajar rápidamente para procesar el material y mover el producto triturado, de modo que pueda entrar la siguiente ronda de biomasa.

Mantener una alta tasa de disponibilidad mecánica es fundamental para cumplir con los plazos impuestos por los contratos. Para Dustin, todo se reduce a un excelente soporte del distribuidor y de fábrica, combinado con un alto grado de autosuficiencia.

“Cuando era niño, mi papá siempre me enviaba con el camión del mecánico y en eso pasé mi vida. Siempre fui bueno con las manos: capaz de desarmar algo y volver a armarlo. Lo disfrutaba y adquirí conocimientos mecánicos a medida que avanzaba. Si no puedes hacer tu propio trabajo mecánico hasta cierto nivel, este negocio se vuelve muy difícil de una manera muy grande. Si sé cómo arreglarlo, vuelvo a estar en funcionamiento en una hora; mientras que, si estoy esperando un camión de servicio, puede convertirse en 24 horas”.
Dustin ha confiado en la rápida entrega de piezas de Tidewater Equipment Newberry. El distribuidor es flexible, adaptándose al horario de Dustin para entregarle piezas los fines de semana o cuando las necesita. Además, “llevamos un remolque de 16 metros (53 pies) completamente abastecido con un inventario de piezas de desgaste, incluidos bloques, dientes, placas frontales, martillos y eslabones de cadena. Si nos encontramos trabajando más lejos de un distribuidor, simplemente aumentamos nuestro nivel de preparación con más piezas a bordo.”

Trabajando en el sureste en sus diversos contratos de corte de césped y derecho de paso, Dustin estuvo expuesto a muchos equipos forestales de Tigercat y se hizo amigo de varias personas que los operaban. “Ellos hablaban de lo buenos que eran y de lo bueno que era el soporte. Y eso es difícil de conseguir”. Con una sólida formación mecánica y el conocimiento específico de las máquinas adquirido en el último año, Dustin ha podido confiar en el soporte telefónico del equipo de servicio de Tidewater en Newberry, así como en la experiencia de Randy McDonald, gerente de ventas industriales de Tidewater y experto en trituradoras, evitando a menudo la necesidad de un técnico en el lugar. “Eso ha sido monumental. Cuando estuve en Houston, una llamada telefónica me devolvió al trabajo. Gran parte del soporte ha sido en realidad telefónico, y nosotros mismos hacemos las reparaciones.”


Si no puedes hacer tu propio trabajo mecánico hasta cierto nivel, este negocio se vuelve muy difícil de una manera muy grande.


— Dustin Cooper, owner of South East Mowing


La operación en el condado de Coffee está a 400 km (250 millas) de Newberry, y Dustin nunca ha estado a menos de 290 km (180 millas) del distribuidor. El gerente de sucursal de Newberry, Kevin Wright, señala que es muy importante para los clientes de desmonte y trituración, que normalmente trabajan en áreas geográficas muy extensas, darse cuenta del tipo de servicio que Tidewater, con respaldo adicional del equipo de servicio de campo de Tigercat Industries, puede proporcionar independientemente de la proximidad al distribuidor.

Mientras tanto, en Tennessee, los municipios y las empresas de servicios de árboles aún están depositando maleza. Si Dustin logra llevar una de sus trituradoras a casa, tiene un patio lleno de desechos esperando ser triturados nuevamente para producción de mantillo o compost. De todos los desafíos de Dustin, encontrar material para alimentar a la trituradora no es uno de ellos.

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Vea este video para observar tres trituradoras 6900 de Tigercat trabajar en operaciones intensas de reducción de material tras el paso del huracán Helene. Las tres trituradoras trabajan a la par, doce horas al día, siete días a la semana, en el procesamiento de 36 500 metros (40 000 yardas) de material cada día.


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