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Toda una vida de compromiso

Desde la concepción del prototipo del feller buncher 726, el supervisor de ensamblaje, Tim Koniuch, lo ha visto todo durante su larga carrera profesional en Tigercat.

— Chris McMillan

En junio de 1987, Tim Koniuch comenzó a trabajar en MacDonald Steel, en el departamento de mantenimiento, bajo la supervisión de Jim Wood. En ese momento, MacDonald Steel suministraba los componentes fabricados a varios fabricantes de equipos móviles. Durante sus años en MacDonald Steel, Tim completó su aprendizaje como mecánico industrial de mantenimiento, y obtuvo su licencia en 1992.

A fines de 1991, cuando comenzó el trabajo en el prototipo del feller buncher 726 de Tigercat, se incorporó a Jim Wood para trabajar con el equipo de diseño en el ensamblaje de la máquina. A medida que el proyecto avanzaba, Jim le pidió a Tim que se uniera al equipo de ensamblaje. El 726 se envió en abril de 1992 con destino a una demostración en campo en vivo en el sur de Georgia. Sin embargo, no estaba completamente terminado. Tim realizó varios viajes por carretera hacia el sur para ayudar a terminar la máquina y dejarla lista para futuras demostraciones y, finalmente, proceder a su venta. “Creo que estuve fuera casi tres meses”, recuerda Tim. “Regresaba cada tres fines de semana”.

Unos meses después, Tim comenzaría a trabajar en el segundo 726. Tim bromea: “Supongo que se podría decir que ahí fue cuando empezó el juego”. El pequeño equipo de Tigercat construyó alrededor de 30 máquinas en la planta de MacDonald Steel en Cambridge, Ontario, antes de que el propietario, Ken MacDonald, adquiriera una planta exclusiva en la cercana ciudad de Brantford. Era necesario equipar el edificio con grúas, naves de ensamblaje y una cabina de pintura, por lo que Tim y otras personas comenzaron a preparar el edificio para la producción. “Nos mudamos a Brantford para organizar todo y comenzar a fabricar máquinas. Lamentablemente, Jim Wood no vino con nosotros”, dijo Tim.

El nuevo hogar de Tigercat sería testigo de varios hitos, como el prototipo del feller buncher sobre ruedas 720 en 1993, el primer feller buncher sobre orugas de Tigercat, el 853E, en 1994, y el primer skidder 630 de Tigercat en 1996. Tim recuerda con mucho cariño haber participado en todos estos proyectos. “Con el 853 trabajé junto a Larry Almond y Grant Somerville, y también construimos el primer skidder, donde trabajé con Jon Cooper”.

Durante ese tiempo, Tim también hacía trabajos de servicio en campo. “Pasé mucho tiempo de viaje cuando era más joven, antes de casarme y tener hijos. Viajaba mucho para hacer trabajos de servicio, numerosas reparaciones por garantía y relaciones públicas con nuestros distribuidores. Fue una gran experiencia para un joven”.
A medida que la producción iba superando la capacidad del edificio original, Tigercat adquirió una segunda instalación en Paris, Ontario, para la producción de los feller bunchers sobre orugas 853E y 845. Finalmente, la producción de los feller bunchers sobre ruedas se trasladaría a 54 Morton Avenue en Brantford. No mucho después, Tim se trasladó a Morton Avenue para tomar el cargo de supervisor de planta.

La instalación funcionaba como planta de subensamblaje de todos los productos, así como de ensamblaje de los feller bunchers sobre ruedas. El área de subensamblaje producía paneles eléctricos y de instrumentos, cabezales de sierra, motores y cabinas. Inicialmente, Tim supervisaba tanto el ensamblaje de máquinas como el subensamblaje. A medida que aumentaba la producción, se enfocó exclusivamente en el ensamblaje de las máquinas.

“Estuve varios años haciendo los feller bunchers sobre ruedas. Luego me preguntaron si quería ir al 140 [Consolidated Drive, Paris] y volver a trabajar con las máquinas sobre orugas”. Tim pasó a trabajar a la planta de ensamblaje de feller bunchers sobre orugas y, cuando se terminó el edificio en 160 Consolidated Drive en 2014, Tim y el grupo de ensamblaje de máquinas sobre orugas se trasladaron allí. Actualmente, Tim es supervisor de ensamblaje final para los productos sobre orugas de la serie 800.

Tim comenta sobre los cambios que ha presenciado a lo largo de los años. “Antes, una sola persona construía toda la máquina, desde la preparación inicial hasta el ensamblaje final e incluso la carga de la máquina. Ver cómo ha evolucionado la fabricación con el tiempo y procurar ser más eficientes ha sido un gran cambio”.
Cuando se le pide que haga un resumen de su paso por Tigercat, Tim responde: “Recuerdo cuando empezamos a construir las primeras máquinas, nos sentábamos y nos reíamos. No podíamos creer que Ken se hubiera metido en la fabricación de máquinas de tala de árboles, y no nos imaginábamos cuán grande se volvería ni qué tan rápido. Vimos la máquina número 100, luego la 200, y de repente fue la máquina 500, y ahora ya superamos las 30 000. Es simplemente asombroso, difícil de creer. Y es bueno saber que has sido parte de todo esto prácticamente desde el primer día. Hoy en día no es fácil encontrar un lugar donde uno pueda trabajar toda su vida. Y tener la suerte de trabajar para un hombre como Ken MacDonald simplemente es increíble”.